sábado, 12 de diciembre de 2015

Puente de Piedra de Ratisbona, Alemania - Italia



En cualquier visita a Ratisbona no puede faltar, bajo ningún concepto, un paseo por esta obra maestra de la arquitectura medieval. El Puente de piedra (Steinerne Brücke) es, junto a la catedral, uno de los símbolos más conocidos de la ciudad y fue, sin duda, uno de los motivos por los que se incluyó a Ratisbona en la Lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. El Puente de piedra, que cruza el Danubio con sus 16 arcos, conectando así el casco antiguo de Ratisbona con el barrio de Stadtamhof, también declarado Patrimonio de la Humanidad, ya era considerado en la Edad Media una de las maravillas del mundo. Sin embargo, fue edificado en tan sólo once años, seguramente desde el 1135 al 1146.

El intenso intercambio comercial que tenía lugar en Ratisbona, por aquel entonces centro económico de primera magnitud, hacía necesario un paso del río permanente. Por esa razón, el Concejo de la ciudad y los representantes de la burguesía mandaron construir esta extraordinaria obra de ingenería. Durante casi 800 años, el Puente de piedra fue, en muchos kilómetros a la redonda, la única vía de comunicación estable que atravesaba el Danubio.

Este impresionante momumento arquitectónico se extiende de una orilla a otra del río gracias a su longitud de más de 300 metros. Dado que era una de las entradas a la ciudad, el Puente estaba vigilado al principio por  tres torres. Hoy se conserva únicamente la torre "Brückturm", desde la que se puede gozar de una espléndida vista panorámica de la ciudad. Si se está de visita en Ratisbona, ¡no se puede desaprovechar la oportunidad de dar un paseo por el Puente de piedra! Saliendo del casco histórico de Ratisbona para adentrarse en esta impresionante atracción turística, pasando al lado del "Bruckmandel" (El Hombrecillo de piedra), colocada en el punto más alto del Puente, para adentrarse posteriormente en el idílico barrio de Stadtamhof.
Esta maravilla de la arquitectura medieval, que sirvió de inspiración al famoso Puente de Carlos en Praga, se halla actualmente cerrada al tráfico. Accesible en silla de ruedas.

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